El Hibiscus sabdariffa es originario del África tropical, pero se adapta muy bien a suelos áridos y a climas secos, lo que lo convierte en un cultivo ideal para el Caribe colombiano.
La flor de jamaica puede consumirse fresca o seca, en infusión o en polvo para añadir a diferentes preparaciones. Gracias a sus múltiples propiedades, se utiliza en la medicina tradicional, la cosmética y también como colorante natural.
La infusión de flor de jamaica contribuye a la prevención de la hipertensión y otras enfermedades cardiovasculares. Contiene altas cantidades de vitaminas (A, C, B1 y E), así como minerales como hierro, fósforo y calcio.
La flor de jamaica es una aliada de los programas de Envol Vert, ya que se trata de un cultivo transitorio de bajo impacto sobre el suelo, que se adapta bien a las condiciones de sequía presentes en ciertas temporadas en el Caribe. Su cultivo se maneja de manera agroecológica, y las y los productores han establecido acuerdos de conservación de sus bosques al comprometerse a participar en esta actividad económica.
Envol Vert también acompaña a las comunidades en la transformación de este producto en mermelada de flor de jamaica. Elaborada a base de flor y panela, esta mermelada tiene un sabor ligeramente ácido y poco dulce.






