Publicado el: 22/02/20202,3 min de lectura

En Tingo María, se vuelve a sentar las bases. Los productores construyen con nosotros la definición del suelo. Es tierra. Es vida. Es donde crecen las plantas. ¡Recibimos muchas respuestas, y cada cual más justas! El suelo es el medio natural donde crecen las plantas, está compuesto de minerales, de aire, de agua y de materia orgánica que se reparten en varios estratos. Cada uno de estos componentes tiene su función. El aire permite llevar oxígeno al suelo y todos los gases que necesitan el suelo y las plantas, también permite el paso de las raíces, de las plantas y de los seres vivos. El agua permite aportar los nutrientes necesarios al crecimiento de las plantas. Los minerales aseguran la fertilidad de la tierra. La última, aunque no menos importante, es la materia orgánica. Permite estabilizar la estructura del suelo, fertilizar la tierra, aumentar la capacidad de retención del agua y del suelo. El conjunto de esta actividad conserva el equilibrio de los nutrientes en el suelo.

Siendo las actividades prácticas la piedra angular de una buena capacitación para los agricultores del proyecto, todos estos conocimientos fueron compartidos y conversados con ellos observando el suelo alrededor de los viveros y de los espacios de capacitación. En San Miguel de Tulumayo el suelo era bien compactado mientras que en Venenillo la materia orgánica permitía conservar un alto grado de humedad. ¡Aquellas observaciones e intercambios con los productores nos permitieron aprender mucho más sobre el suelo de cada uno de los centros poblados! Los productores, ya estaban sensibilizados al impacto del uso de productos químicos, sin embargo, este ciclo de capacitación les permitió entender mejor por qué era peligroso para el suelo y sobre todo para quién (los microorganismos y ¡su propia salud!).

Esta capacitación permito al equipo de Tingo María sensibilizar a los grupos a técnicas de conservación de los suelos (plantar una cobertura de suelo, conservar su hojarasca, etc.) y al papel de los árboles (cada hoja que cae ofrece un nutriente complementario a la tierra) ¡para darles una visión global de las especies nativas de árboles que les pueden servir y que podrán plantar en sus parcelas! Esta capacitación se inscribe en un programa más amplio, por ejemplo trataremos de las temáticas de los sistemas agroforestales y de los monocultivos el mes que viene, pero también de diversificación y conservación en el mes de abril.

En Tingo María, se vuelve a sentar las bases. Los productores construyen con nosotros la definición del suelo. Es tierra. Es vida. Es donde crecen las plantas. ¡Recibimos muchas respuestas, y cada cual más justas! El suelo es el medio natural donde crecen las plantas, está compuesto de minerales, de aire, de agua y de materia orgánica que se reparten en varios estratos. Cada uno de estos componentes tiene su función. El aire permite llevar oxígeno al suelo y todos los gases que necesitan el suelo y las plantas, también permite el paso de las raíces, de las plantas y de los seres vivos. El agua permite aportar los nutrientes necesarios al crecimiento de las plantas. Los minerales aseguran la fertilidad de la tierra. La última, aunque no menos importante, es la materia orgánica. Permite estabilizar la estructura del suelo, fertilizar la tierra, aumentar la capacidad de retención del agua y del suelo. El conjunto de esta actividad conserva el equilibrio de los nutrientes en el suelo.

Siendo las actividades prácticas la piedra angular de una buena capacitación para los agricultores del proyecto, todos estos conocimientos fueron compartidos y conversados con ellos observando el suelo alrededor de los viveros y de los espacios de capacitación. En San Miguel de Tulumayo el suelo era bien compactado mientras que en Venenillo la materia orgánica permitía conservar un alto grado de humedad. ¡Aquellas observaciones e intercambios con los productores nos permitieron aprender mucho más sobre el suelo de cada uno de los centros poblados! Los productores, ya estaban sensibilizados al impacto del uso de productos químicos, sin embargo, este ciclo de capacitación les permitió entender mejor por qué era peligroso para el suelo y sobre todo para quién (los microorganismos y ¡su propia salud!).

Esta capacitación permito al equipo de Tingo María sensibilizar a los grupos a técnicas de conservación de los suelos (plantar una cobertura de suelo, conservar su hojarasca, etc.) y al papel de los árboles (cada hoja que cae ofrece un nutriente complementario a la tierra) ¡para darles una visión global de las especies nativas de árboles que les pueden servir y que podrán plantar en sus parcelas! Esta capacitación se inscribe en un programa más amplio, por ejemplo trataremos de las temáticas de los sistemas agroforestales y de los monocultivos el mes que viene, pero también de diversificación y conservación en el mes de abril.

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