Si bien el proyecto se basaba en el desarrollo de modelos agroforestales mediante la plantación de variedades autóctonas de árboles madereros, frutales y plantas auxiliares en parcelas de cacao, café o zonas degradadas por la agricultura, poco a poco ha ido evolucionando hacia un proyecto de apoyo a los agricultores para que adopten buenas prácticas agrícolas respetuosas con los bosques y la biodiversidad. Entre capacitaciones e intercambios de prácticas, trabajo en viveros y talleres sobre cuestiones de género, se han identificado diversas alternativas económicas a la deforestación en las 2 zonas del proyecto:

• En Pichanaki, la nuez de nogal negro (Juglans Neotropica) y la red de semillas forestales de especies arbóreas autóctonas.
• En Tingo María, la miel y subproductos (polen, propóleos) de las abejas nativas de la Amazonia, los melipones.

Estas abejas permiten a los agricultores depender menos de sus cultivos predominantes, el café y el cacao, y diversificar así sus ingresos, preservando al mismo tiempo sus zonas forestales. 

Actividades de sensibilización también son organizadas para ayudar a conservar las últimas zonas boscosas y limitar la agricultura migratoria, principal fuente de deforestación en las regiones de intervención.

El programa se ejecuta conjuntamente con cinco cooperativas de productores.ras de café y cacao. Éstas participan a diario en la definición y ejecución de las actividades del proyecto, aportando su apoyo técnico y financiero