En enero del 2022, 15 agricultores del proyecto de Pichanaki, participaron de una pasantía sobre «Iniciativas de Conservación Privada y Voluntaria». Esta actividad tuvo como objetivo conocer las formas de conservación de bosques, desarrolladas de forma voluntaria y privada, es decir, en predios privados: las Areas de Conservación Privadas (ACP).
Visitamos 3 Iniciativas de conservación voluntarias, de las 10 que forman parte de la Red de Iniciativas de Áreas de Conservación de Oxapampa RIACO, y que tiene entre sus objetivos:
Las tres iniciativas de conservación que conocimos fueron:
Tierra de Bosques
liderada por Lucía y Marcos, cuentan con 46 hectáreas, de las cuales, 30 corresponden a bosque en pie. donde aprovechan los recursos del bosque al mismo tiempo que lo protegen y rehabilitan a través de técnicas como agricultura regenerativa y bioconstrucción, en esta última, utilizan elementos de la naturaleza como arcilla, madera, viruta y otros residuos orgánicos para la construcción de las viviendas, este tipo de construcciones reducen el impacto en el paisaje natural. Durante el recorrido, Marcos nos recordó la importancia de mantener las cumbres cubiertas de bosques para permitir la captación de las aguas de neblina y de la lluvia, y así alimentar los ojos de agua en zonas más bajas.
Bosques de Churumazú
Eduardo Jackson, titular de este ACP, nos introdujo al maravilloso bosque montano, 14 hectáreas son protegidas aquí. Aquí suele acoger personas aficionadas o especialistas en avistamiento e identificación de aves, puesto que, solo en este espacio, se ha identificado 176 especies de aves, 6 de ellas, endémicas. Eduardo nos recordó la importancia de las aves en la conservación y recuperación de los bosques y agricultura, por sus funciones de polinización y dispersión de semillas. Aprendimos sobre su experiencia en la restauración asistida de áreas degradadas por sobrepastoreo del ganado, donde trabajó con especies nativas remanentes de los bosques cercanos. Eduardo a través de su ACP, contribuye a la conectividad del paisaje y hábitat de varias especies de fauna, entre ellas el emblemático Oso de Anteojos. También su bosque es hábitat de especies de flora en peligro, como el nogal negro, bien conocido por los participantes.
El Palmeral
La iniciativa está dirigida por Patricia Reyna, educadora y psicoterapeuta de profesión, y conservacionista de corazón. Patricia protege 10 hectáreas de bosques de neblina, contribuye a proteger la biodiversidad y especies amenazadas como la palmera Basanco (Dictyocaryum lamarckianum), el helecho arbóreo y 6 aves endémicas, al mismo tiempo que, conecta a las personas con la naturaleza y mejora sus condiciones de salud física y emocional, a través de una técnica conocida como «baños de bosque«, servicio que brinda a sus visitantes y le permite generar ingresos económicos. Patricia es una mujer inteligente y guerrera de la conservación, como muchas de las agricultoras con quienes trabajamos en Envol Vert.
Además de las iniciativas individuales, las tres ACP visitadas desarrollan un proyecto conjunto, a través de su Red, donde personas pueden apadrinar o adoptar árboles en pie (o plantados) para su conservación, generando ingresos a la Red. Una nueva forma de financiar la conservación.
Los participantes de Envol Vert también compartieron con Eduardo, Marcos y Patricia algunos de sus conocimientos adquiridos en el campo de la agroforestería y conservación. En conclusión, fue un día lleno de aprendizajes y de intercambio de conocimientos y experiencias exitosas aliando recursos económicos, agricultura sostenible y conservación del bosque y de su biodiversidad.
En enero del 2022, 15 agricultores del proyecto de Pichanaki, participaron de una pasantía sobre «Iniciativas de Conservación Privada y Voluntaria». Esta actividad tuvo como objetivo conocer las formas de conservación de bosques, desarrolladas de forma voluntaria y privada, es decir, en predios privados: las Areas de Conservación Privadas (ACP).
Visitamos 3 Iniciativas de conservación voluntarias, de las 10 que forman parte de la Red de Iniciativas de Áreas de Conservación de Oxapampa RIACO, y que tiene entre sus objetivos:
Las tres iniciativas de conservación que conocimos fueron:
Tierra de Bosques
liderada por Lucía y Marcos, cuentan con 46 hectáreas, de las cuales, 30 corresponden a bosque en pie. donde aprovechan los recursos del bosque al mismo tiempo que lo protegen y rehabilitan a través de técnicas como agricultura regenerativa y bioconstrucción, en esta última, utilizan elementos de la naturaleza como arcilla, madera, viruta y otros residuos orgánicos para la construcción de las viviendas, este tipo de construcciones reducen el impacto en el paisaje natural. Durante el recorrido, Marcos nos recordó la importancia de mantener las cumbres cubiertas de bosques para permitir la captación de las aguas de neblina y de la lluvia, y así alimentar los ojos de agua en zonas más bajas.
Bosques de Churumazú
Eduardo Jackson, titular de este ACP, nos introdujo al maravilloso bosque montano, 14 hectáreas son protegidas aquí. Aquí suele acoger personas aficionadas o especialistas en avistamiento e identificación de aves, puesto que, solo en este espacio, se ha identificado 176 especies de aves, 6 de ellas, endémicas. Eduardo nos recordó la importancia de las aves en la conservación y recuperación de los bosques y agricultura, por sus funciones de polinización y dispersión de semillas. Aprendimos sobre su experiencia en la restauración asistida de áreas degradadas por sobrepastoreo del ganado, donde trabajó con especies nativas remanentes de los bosques cercanos. Eduardo a través de su ACP, contribuye a la conectividad del paisaje y hábitat de varias especies de fauna, entre ellas el emblemático Oso de Anteojos. También su bosque es hábitat de especies de flora en peligro, como el nogal negro, bien conocido por los participantes.
El Palmeral
La iniciativa está dirigida por Patricia Reyna, educadora y psicoterapeuta de profesión, y conservacionista de corazón. Patricia protege 10 hectáreas de bosques de neblina, contribuye a proteger la biodiversidad y especies amenazadas como la palmera Basanco (Dictyocaryum lamarckianum), el helecho arbóreo y 6 aves endémicas, al mismo tiempo que, conecta a las personas con la naturaleza y mejora sus condiciones de salud física y emocional, a través de una técnica conocida como «baños de bosque«, servicio que brinda a sus visitantes y le permite generar ingresos económicos. Patricia es una mujer inteligente y guerrera de la conservación, como muchas de las agricultoras con quienes trabajamos en Envol Vert.
Además de las iniciativas individuales, las tres ACP visitadas desarrollan un proyecto conjunto, a través de su Red, donde personas pueden apadrinar o adoptar árboles en pie (o plantados) para su conservación, generando ingresos a la Red. Una nueva forma de financiar la conservación.
Los participantes de Envol Vert también compartieron con Eduardo, Marcos y Patricia algunos de sus conocimientos adquiridos en el campo de la agroforestería y conservación. En conclusión, fue un día lleno de aprendizajes y de intercambio de conocimientos y experiencias exitosas aliando recursos económicos, agricultura sostenible y conservación del bosque y de su biodiversidad.